Los sistemas de alarma contra incendios desempeñan un papel fundamental en tu estrategia de prevención y detección. Los detectores ópticos de humo son vitales en la seguridad contra incendios, ya que activan el sistema de alarma que nos alertará de un potencial peligro, salvando así vidas y equipos.
Desde su primera instalación y durante el tiempo que permanezcan instalados en el techo, es primordial hacer pruebas periódicas para garantizar su óptimo funcionamiento.
"Al menos una vez al año, debe verificarse que todos los detectores responden al fenómeno físico para el que han sido concebidos: el funcionamiento de los detectores de humo debe ser verificado por medios que confirmen que el humo (aerosol) puede entrar en el interior de la cámara de detección y producir una señal de alarma de incendio."
En este mismo sentido, la frecuencia de estas pruebas es muy importante. La misma norma, en el capítulo A.11.2.1, señala:
“Control anual: Al menos una vez cada año, el usuario y/o la propiedad deben asegurarse de que una persona competente comprueba el funcionamiento correcto de todos los detectores.”
Como alude la norma, el método más tradicional y utilizado para realizar profesionalmente estas pruebas funcionales consiste en accionar botes de aerosol colocados en un dispensador.
Desde su primera instalación y durante el tiempo que permanezcan instalados en el techo, es primordial hacer pruebas periódicas para garantizar su óptimo funcionamiento.
Requisitos Legales y Mantenimiento de Detectores de Humo
La norma española UNE23007-14:2014 y, más concretamente, el capítulo 11.2.1, detalla con exactitud los requisitos legales en torno a su mantenimiento:"Al menos una vez al año, debe verificarse que todos los detectores responden al fenómeno físico para el que han sido concebidos: el funcionamiento de los detectores de humo debe ser verificado por medios que confirmen que el humo (aerosol) puede entrar en el interior de la cámara de detección y producir una señal de alarma de incendio."
En este mismo sentido, la frecuencia de estas pruebas es muy importante. La misma norma, en el capítulo A.11.2.1, señala:
“Control anual: Al menos una vez cada año, el usuario y/o la propiedad deben asegurarse de que una persona competente comprueba el funcionamiento correcto de todos los detectores.”
Como alude la norma, el método más tradicional y utilizado para realizar profesionalmente estas pruebas funcionales consiste en accionar botes de aerosol colocados en un dispensador.
Consideraciones para el Uso de Aerosoles en Pruebas de Detectores
Existen 6 consideraciones principales a la hora de utilizar botes de aerosol para realizar pruebas, ¿las conoces?- Aerosoles y Dispensadores: Asegúrate de utilizar aerosoles adecuados y dispensadores compatibles.
- Inflamables o No Inflamables: Verifica si los aerosoles son inflamables y toma las precauciones necesarias.
- Antigüedad y Sensibilidad del Detector Óptico de Humo (Caducidad): Revisa la caducidad y sensibilidad de los detectores.
- Temperatura: Considera las condiciones de temperatura durante la prueba.
- Transporte y Almacenamiento: Asegúrate de que los aerosoles se transporten y almacenen correctamente.
- Aplicación y Entorno de la Instalación: Adapta la aplicación de los aerosoles al entorno específico de la instalación.